- ¿Y ahora para que?
- No lo sé, siento que decepcioné a mucha gente.
- Lo importante no son ellos, si no el como tu te sientes.
- ¿Te refieres a si soy feliz con ello?
- Exacto.
- Pues no, no soy feliz.
- ¿Entonces? Porque ya es muy tarde para arrepentirse ¿no crees?
- Pero nunca es tarde para recapacitar
...
- ¿Y en que piensas ahora?
- En que probablemente ya no me quiere ni ver.
- ¿Y eso es importante?
- Si... porque por hacer una tontera perdí todo lo que tenía ganado
- Si es de verdad no se va a morir todo con eso.
- Esperemos que por alguna vez tengas razón.
- Cariño mío, yo siempre tengo razón.
- Si, vierai.
- Hazme caso. Deja que todo fluya y verás como todo se mejora. Como dicen por ahí al mal tiempo...
- buena cara.
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